Cita "Lo curioso es que en todas partes –e independientemente de qué religión se trate-, allí donde se produce una intensificación del celo religioso, esa intensificación reviste un carácter regresivo, conservador, fundamentalista."
El autor La influencia de la obra de Kapuscinski se ha dejado notar en numerosas disciplinas, no sólo en la que fue su principal dedicación: el periodismo, donde gracias a sus reportajes se ha convertido en una figura de referencia, sino también en la narrativa –desde la ficción pura y dura a la no-ficción y los cruces de ambos géneros- y en la poesía. Además, obtuvo el reconocimiento del público –sus libros son éxitos de ventas, sobre todo “Ébano”- y de las instituciones: Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.
El autor La influencia de la obra de Kapuscinski se ha dejado notar en numerosas disciplinas, no sólo en la que fue su principal dedicación: el periodismo, donde gracias a sus reportajes se ha convertido en una figura de referencia, sino también en la narrativa –desde la ficción pura y dura a la no-ficción y los cruces de ambos géneros- y en la poesía. Además, obtuvo el reconocimiento del público –sus libros son éxitos de ventas, sobre todo “Ébano”- y de las instituciones: Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.
Síntesis Cualquiera que los haya leído sabe que sus reportajes son especiales, distintos al resto. Cada uno de sus viajes, de sus contactos con otras culturas, estuvo siempre acompañado de una profunda investigación antropológica, cimentada en numerosas lecturas de la materia, que siempre contrastaba con sus propias experiencias sobre el terreno. De esas experiencias surgen estas conferencias donde explica, en buena medida, las intenciones de sus reportajes: permitirnos conocernos a nosotros mismos a través de nuestro reflejo en los otros.
Comentario En una de las conferencias recogidas en este pequeño y denso libro se cita a McLuhan y su concepción de al aldea global como un ideal que contrasta con la metáfora más exacta de aquello en lo que nos hemos convertido: una multitud de viajeros individualizados en un aeropuerto que se cruzan los unos con los otros sin comunicarse entre ambos. Frente a esa fría realidad, Kapuscinski añora el ideal del visionario canadiense, en el que la tecnología nos permita sentirnos siempre acompañados y acogidos como en el seno de una aldea tradicional.
La convivencia del periodista con numerosos Otros a lo largo de sus investigaciones le coloca en un lugar privilegiado para hablar del cambio del paradigma de la alteridad. Frente a la concepción etnocéntrica de los primeros antropólogos, en la que se trabajaba siempre con la oposición entre Europa y ese Otro que habita las colonias, los países que no rigen el destino de la humanidad, Kapuscinski nos presenta una nueva realidad donde el Otro es el vecino de la puerta de al lado. La relación vertical entre Primer y Tercer Mundo se ha modificado para convertirse en una relación horizontal donde el Otro es el habitante de cualquier otro país de este mundo que se ha reducido a golpes de tecnología y medios de transporte.
Malinowski, Tischner y algún otro autor comparecen en estas conferencias, pero resulta iluminadora la presencia de Lévinas, ya que en su pensamiento se genera una nueva idea del Yo en la que éste no se circunscribe a un solo individuo que se opone al Otro, sino que lo acoge, formando así una nueva realidad en la que esa oposición queda abolida.
Comentario En una de las conferencias recogidas en este pequeño y denso libro se cita a McLuhan y su concepción de al aldea global como un ideal que contrasta con la metáfora más exacta de aquello en lo que nos hemos convertido: una multitud de viajeros individualizados en un aeropuerto que se cruzan los unos con los otros sin comunicarse entre ambos. Frente a esa fría realidad, Kapuscinski añora el ideal del visionario canadiense, en el que la tecnología nos permita sentirnos siempre acompañados y acogidos como en el seno de una aldea tradicional.
La convivencia del periodista con numerosos Otros a lo largo de sus investigaciones le coloca en un lugar privilegiado para hablar del cambio del paradigma de la alteridad. Frente a la concepción etnocéntrica de los primeros antropólogos, en la que se trabajaba siempre con la oposición entre Europa y ese Otro que habita las colonias, los países que no rigen el destino de la humanidad, Kapuscinski nos presenta una nueva realidad donde el Otro es el vecino de la puerta de al lado. La relación vertical entre Primer y Tercer Mundo se ha modificado para convertirse en una relación horizontal donde el Otro es el habitante de cualquier otro país de este mundo que se ha reducido a golpes de tecnología y medios de transporte.
Malinowski, Tischner y algún otro autor comparecen en estas conferencias, pero resulta iluminadora la presencia de Lévinas, ya que en su pensamiento se genera una nueva idea del Yo en la que éste no se circunscribe a un solo individuo que se opone al Otro, sino que lo acoge, formando así una nueva realidad en la que esa oposición queda abolida.
Ryszard Kapuściński, Encuentro con el Otro, Anagrama, Barcelona, 2008
Publicado en el diario Público el 19 de enero de 2008