11 diciembre 2008

Invitación a la lectura

Hay editores que no dudan en confesarte que el libro que publicaron es una pieza fundamental en la Historia de la Literatura y que se sienten honradísimos de haber podido ofrecérselo al público lector. Pueden estar durante horas hablándote de lo bueno que es el volumen y de cómo uno no puede abandonarlo una vez lo ha abierto.
Otros te previenen contra su libro, y te confiesan que casi nadie ha pasado de la primera página porque es un texto muy complejo y arduo.
Son dos modos de invitar a la lectura igual de válidos, pero a día de hoy los que usan el primero son la inmensa mayoría. ¿Por qué?