13 julio 2012

Íntimo y personal, sobre Sr. Chinarro


¿Por qué después de más de quince años de carrera un grupo se convierte en una referencia generacional? No basta con que “Del montón” sea pegadiza, no basta con tener el apoyo de una discográfica y los medios para llegar, cada día, a más gente. Quizá la respuesta esté en la honestidad de las canciones y la hondura de la propuesta de Antonio Luque. Frente a lo superficial y voluble del mercado discográfico, que cuando algo funciona comercialmente se dispone a lanzar un ejército de propuestas clonadas, o ante los productos prefabricados bien sea en programas de televisión o por parte de productores que imponen sus criterios a intérpretes que son meras marionetas, las canciones de Señor Chinarro destilan autenticidad a raudales.
Además, la sensibilidad de Antonio Luque es única dentro del panorama español. Hace canciones pop con letras profundas y sugerentes –nada que ver con los balbuceos o intrascendencia de la mayoría de sus coetáneos-, y se le considera un cantautor sin hacer las típicas canciones pegado a una guitarra y que parecen pensadas para el festival de la OTI –esas canciones ubicadas entre la progresía de palo y el lirismo baboso de un quinceañero-.
Y todo eso tomó cuerpo en el concierto íntimo –qué lujo poder asistir a un concierto así- del Colegio de Médicos. Arropado por batería, bajo y guitarra, protegido por una acústica, fue repasando algunas de las canciones más celebradas de sus dos discos anteriores –“El fuego amigo” y “El mundo según”- y presentando en directo buena parte del recién lanzado “Ronroneando”. Todo los que han seguido la trayectoria de Señor Chinarro saben de los conciertos accidentados de sus inicios. Pero eso ya ha quedado atrás, ahora suena siempre correcto, las canciones se suceden impecables –salvo un en la que Luque no terminó de entrar en el ritmo de tuna con que la tocaron- y se permite incluso bromas sobre la necesidad de afinar a la perfección las guitarras.
Cualquiera con oído y criterio sabe que Señor Chinarro son un de las referencias musicales actuales, lo que acudieron al concierto lo firmarían sin dudarlo. 
Aparecido en el diario Público en abril de 2008